Lo ideal y más tradicional son los bocadillos o sandwiches de jamón, queso, de paté, de mermelada, de chocolate, o de algún embutido. Las pizzas, así como los canapés y palomitas, también son atrayentes a los niños. Para empezar, nada mejor que ofrecer los deseados snacks, es decir, las patatas fritas, palomitas, etc.